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De arquitecto a artesano, una historia de éxito.

Para José Luis Vargas Luévano, el quedarse sin empleo dio origen a iniciar un oficio hermoso, que hasta el día de hoy ha sido su sostén de vida.

“Voy para 18 años fabricando artesanías, muchas cosas llegan con la crisis, ésta es buena si le toma uno el lado positivo, me quedé sin trabajo siendo arquitecto, al principio no sabía qué hacer, caí en depresión y dificultades económicas, entonces algo había que hacer”, comenta.

El inicio de su carrera en el arte de la artesanía fue al visitar a un amigo psicólogo, el cual le comentó que urgía comenzara a desempeñar cualquier actividad. Agradecido, pero aún no convencido salió de la visita pensando mucho en aquel consejo; grande fue su sorpresa al ser alcanzado por su amigo que le compartió lo que sabía le gustaba al arquitecto, realizar trabajos con sus propias manos, así que le propuso se dedicara a la artesanía, donde podía aportar arte a la sociedad.   Fue difícil concebir que de tener una profesión redituable en el ramo de la construcción tenía que dedicarse a un oficio.

“Al hacerme artesano las cosas comenzaron a cambiar, económicamente no he alcanzado el nivel de vida al que estaba acostumbrado, en cambio he tenido muchas satisfacciones porque estoy haciendo lo que me gusta. Le puse nombre a lo que hago artesanalmente, ludoplastia (sin acento),  que quiere decir jugar con las formas, pero esa es la definición literal, la definición conceptual va más allá, es conocer el origen de las formas para entonces jugar con ellas”, comparte Vargas.

Para iniciar su carrera de artesano no tenía recursos económicos para comprar material. En esa situación recuerda que se acercaba a los contenedores y veía muchas botellas de plástico, con las cuales inicio su exitosa carrera artística. Aunque con el paso del tiempo dejo de trabajar ese material al darse cuenta que con el cartón tenía más potencial para crear obras, además la ludopastia  le da la libertad de trabajar con cualquier tipo de recursos.

“Tomo mucho en cuenta hasta donde irían estas artesanías que realizo, ya hay mucho trabajo personal distribuido por todo el mundo. Un nacimiento pequeño que hice tuvo mucha sensación en Pekín, para participar en ese evento que organizo la iglesia de allá tuve la invitación del ICA y aunque no gané un premio,  fue el que más comentarios agradables tuvo”, señala.

Por otro lado en actividades de la Casa de las Artesanías, en donde expone sus trabajos, se está invitando para que cada 15 días alguien de los expositores  que tienen ahí su mercancía,  expongan una conferencia para que otros artesanos  que nos visiten de otros estados,   vayan conociendo lo que se está realizando en la entidad, “entonces yo quiero aportar a mis compañeros artesanos y a la gente en general el que es necesario tener un valor añadido cuando nos ponemos a trabajar, si vamos a jugar con las formas, pues conocer su origen”, finaliza este exitoso emprendedor.

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