Como parte de una nueva política salarial emprendida por el Gobierno Federal, a partir del 1 de enero de 2019, el Salario Mínimo General en México ascenderá a 102.68 pesos diarios, mientras que en la frontera norte se incrementará a los 176.72 pesos, anunció el presidente del país, Andrés Manuel López Obrador. Esto representa un aumento del 16.2% y 99.18% respectivamente.
El presidente señaló que se instruyó a Luisa María Alcalde, secretaria de Trabajo y Previsión Social, para que conciliara y acordara el aumento salarial con los empresarios y trabajadores, y consultara con el Banco de México para evitar que la medida provocará una inflación.
La Confederación Patronal de México (COPARMEX) adelantó el anuncio señalando que «por acuerdo tripartita y unánime de la CONASAMI, se acordó la subida del salario mínimo. La cámara empresarial destacó la decisión, ya que «cubre el 100% de la Línea de Bienestar de Coneval». En un comunicado, el organismo celebró que se haya logrado el primer objetivo de la Nueva Cultura Salarial que han venido impulsando. Asimismo, calificó la resolución como histórica.
Sin embargo, COPARMEX lamentó «la determinación de crear una nueva zona económica salarial en los municipios ubicados en los 25 kilómetros inmediatos a la frontera norte y algunos colindantes a éstos».
Señala que es innegable que la decisión de conformar un Salario Mínimo Fronterizo proviene de la insistencia del Presidente de la República para «duplicar lisa y llanamente en la franja fronteriza norte el SMG, como parte de una estrategia económica regional».
En entrevista para El Universal, Luisa María Alcalde indicó que la creación de una nueva zona económica es una política para impulsar la región norte del país y permita ser «la última cortina para que la gente no tenga que irse del otro lado de la frontera, sino encuentre oportunidades de vida en su país».