Por Manuel Villalpando Villalpando, Director General de Techno Consulting
Algunas personas emprenden solos, otros sólo si tienen uno o más socios involucrados en el proyecto de la nueva empresa. ¿Cómo decidir en un sentido u otro? A continuación algunas recomendaciones:
Emprender sólo: Recomiendo emprender sólo cuando no se requiere gran inversión inicial, y, lo que se requiere es básicamente el conocimiento del área (ejemplo, sector servicios). Por otro lado, el talento para desarrollar la actividad económica, se podrá conseguir por contratación por proyecto, subcontratación, o bien, mediante contrataciones de empleos formales.
Es posible también emprender una empresa de elaboración de productos, si se consigue financiamiento propio o mediante préstamo, pero, recomiendo ser cauteloso en este sentido.
Es conveniente emprender sólo cuando se desea tomar decisiones sin tener que consultar a otras personas, con la finalidad de que el proceso de toma de decisiones sea más ágil y menos burocrático.
El crecimiento quizá pueda ser más lento, en el sentido que los recursos provendrán de fuentes propias o de un préstamo con garantías personales.
La satisfacción cuando se obtiene éxito con un emprendimiento sólo, podrá ser mayor, pero, no es momento de descuidarse ni dormirse en los laureles, dado que si el emprendedor baja la guardia, no hay quien entre a suplir las deficiencias que se pudieran generar.
Emprender con socios: El emprender con otros colaboradores permitirá tener mayor retroalimentación en las decisiones a tomar, por otro lado, el riesgo también se dispersa, por la conjunción de tiempo, talento y recursos financieros de varios individuos.
El proceso de toma de decisiones podrá resultar ser más complejo, pero, si se definen bien los roles (quién es el director general, director administrativo, financiero, etc.), podría aligerarse esta tarea.
Cuando la empresa es pequeña, el crecimiento podría ser más rápido, quizá no así en empresas grandes y consolidadas en donde iniciativas para crecer tardan más en autorizarse e implementarse.
Un justo equilibrio que he encontrado en mi vida empresarial, es emprender inicialmente sólo, pero, en otras empresas, sí buscar socios, dado que la cantidad de recursos (tiempo, dinero) propios son finitos, de ahí que es conveniente potenciar con recursos provenientes de otras personas.
Así pues, sea sólo o acompañado, emprender es una actividad por demás importante. Recordemos que los principales empleadores en el país son las empresas. Así pues, tanto para otorgar valor económico a la sociedad, como para crear fuentes de empleo, sigamos emprendiendo, eligiendo el camino para realizarlo que mejor convenga.