Quizá una de las prestaciones más valoradas es el aguinaldo, ese derecho irrenunciable de todo trabajador mexicano y que debe de ser entregado antes del 20 de diciembre (pasado mañana). No importa si no has cumplido el año laborando en tu empresa, ésta deberá otorgarte el monto proporcional según el tiempo que lleves trabajando.
Si no sabes de cuánto será tu gratificación, hay herramientas que te ayudan a estimarlo. Por ejemplo, el portal Nomilinea tiene a disposición una calculadora de aguinaldo, para que con base en un formulario, puedas hacer una aproximación al monto de dinero que recibirás, lo cual te servirá para hacer una mejor planeación financiera y hacer frente a los gastos característicos de fin de año y a la famosa cuesta de enero; y no terminar como el gif de John Travolta, contrariado por no saber adónde se fue su dinero de la cartera.
Asimismo, la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF) ha emitido una serie de recomendaciones para que le saques el máximo provecho posible a tu aguinaldo y no lo termines dilapidando, algo factible con todas las tentaciones que rodean a la época navideña.
- Elabora un presupuesto. Realizarlo te permitirá conocer tu capacidad de pago y así establecer un límite en tus compras, para evitar comprometer tu ingreso futuro.
- Paga deudas de corto plazo. Puedes utilizar una parte de tu aguinaldo para reducir tus adeudos -por ejemplo las de tus tarjetas de crédito-, así podrás iniciar el 2018 con menos deudas o mejor aún, sin ellas.
- Evita las compras impulsivas y planea tus adquisiciones. Planear tus compras con anticipación puede representar un ahorro importante, no te dejes llevar por la emoción de las fechas y termines comprando más de lo pensado, sin pensar cómo lo vas a pagar.
- Compara precios. Antes de adquirir cualquier producto compara precios en distintos comercios, te sorprenderás del ahorro que puedes lograr en cada artículo.
- Destina una parte al ahorro. Destinar una parte de tu aguinaldo al ahorro, te permitirá contar con recursos para enfrentar un imprevisto, pagar compromisos financieros de inicio de año o evitar la llamada “cuesta de enero”.
- Inviértelo. Invertir una parte de tu aguinaldo para hacer crecer tu patrimonio, es una alternativa, o bien, considera realizar aportaciones voluntarias a tu Afore.
- Realiza tus compras seguras por internet, verificando que el sitio cuente con el protocolo de seguridad https:// y un candado cerrado en la barra de direcciones. Asimismo, verifica su dirección, teléfonos, así como sus políticas de pago, envíos, reclamación y de privacidad de la información.
- Al pagar con tarjeta de débito o crédito, solicita que se haga la operación en la Terminal Punto de Venta (TPV) y en tu presencia, con la finalidad de evitar una posible clonación de tu plástico o cargos indebidos. No olvides guardar los vouchers para cualquier aclaración.
- Si no te pagan tu aguinaldo o no lo hacen en la fecha límite establecida por la Ley, acude o habla a la Procuraduría Federal del Trabajo (PROFEDET).