Roberto Hernández, director de la película documental Presunto Culpable, advirtió del conflicto de interés que habrá si el senado decide elegir a Eduardo Medina Mora como ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
“Hay un conflicto de interés porque hay casos que él inició como procurador y le tocaría probablemente escucharlos si es ministro de la suprema corte de justicia”, dijo ayer en Aguascalientes en conferencia de prensa.
“Me parece que tenemos un gobierno a nivel federal y local donde los conflictos de interés están al orden del día; tenemos gobernadores que usan el poder público para beneficiarse o un presidente de la república que compró una casa blanca en las Lomas y la empresa que le da el préstamo es la empresa que va a hacer el tren bala”.
El abogado, quien saltara a la fama luego de documentar los excesos de la procuraduría del Distrito Federal al tratar de inculpar a un inocente de un asesinato, también criticó que se haya quedado como procuradora de la república Arely Gómez, hermana de uno de los vicepresidentes de Televisa, Leopoldo Gómez.
“Lo mismo pasa con Areli Gómez, que tiene nexos con personas encumbradas con gente de Televisa y desde un principio del sexenio hubo un cuestionamiento por la conexión del presidente y esa empresa y en contratos donde probablemente se vendieron espacios de información como cobertura noticiosa”.
Hernández estuvo en la entidad para dar una plática a empresarios miembros de Coparmex, y aprovechó para anunciar que ya está en marcha su segundo rodaje, el cual, anticipó, tendrá como tema central la vida de los policías en México.