El empresariado mexicano estima un flojo crecimiento para los próximos 3 años, así lo revela la Encuesta Mensual de Opinión Empresarial (EMOE) de INEGI donde se expone un panorama adverso en el desarrollo de los sectores de manufactura, comercio y construcción.
De acuerdo con la publicación, el índice de confianza para diciembre 2016 fue el más bajo desde 2013, cuando alcanzó su máximo histórico. El comercio fue el área más perjudicada, pues la certidumbre de los empresarios pasó de 58.9 a 43.5 por ciento durante ese periodo, una diferencia de 15.4 puntos. Construcción detectó el segundo rendimiento más bajo (-12.4 puntos), pasando de 55.8 a 43.4 por ciento. Mientras que la industria manufacturera redujo su confianza en 10.1 puntos durante el mismo período.
En tan sólo un año la seguridad para invertir en construcción se redujo en 8.1 puntos, siendo este el rango que más decreció. “La situación actual del país”, como lo indican los encuestados, podría ser uno de los principales motivos de esta inseguridad, ya que es este el factor con la segunda disminución más fuerte (-6.9 puntos).
Por su parte, manufactura encontró en sus principales causas de desconfianza “la situación presente y futura del país”, ya que registró un retroceso de -4.9 y -5.7 puntos respectivamente en la comparación anual de 2015 y 2016. No obstante, fue el sector menos perjudicado en confianza empresarial. Al corte del año acumuló 46.5 puntos, ubicándose por encima de los otros dos sectores.
El sector comercial no encontró tanta diferencia entre un año y otro (-4.4 puntos), sin embargo, “la situación actual del país” fue su principal preocupación durante el último año, dado que su confianza sobre el entorno nacional redujo -6.5 puntos.
Para los dos últimos años el desarrollo de este sector ha cambiado drásticamente. Entre 2013 y 2014 la confianza empresarial en comercio no bajó de los 50 puntos, mientras que en 2015 registró una puntuación por debajo esta barrera. Al final de 2016 se encontró en 43.5 puntos.