Al término de la actual administración estatal, no habrá un solo autobús del transporte público urbano que esté fuera de norma, lo que implica la renovación de las unidades que actualmente circulan y que tienen más antigüedad de la que prevé la ley.
Así lo garantizó el coordinador general de Movilidad de Gobierno del Estado, Óscar Aragón Jiménez, quien explicó que son 322 los camiones que tendrán que renovarse, por haber concluido su vida útil.
“Terminando la administración no va a haber un solo autobús que haya pasado su edad productiva; ningún autobús habrá circulando -cuando termine la administración- que esté fuera de norma”, recalcó.
Aseguró que los concesionarios están conscientes de que deben renovar las unidades y quien no lo quiera hacer, entonces perdería la concesión, pues la ley establece como una condicionante el cambio de los camiones en un plazo determinado, “simplemente el que quiera dar servicio lo tiene que hacer”, dijo.
Asimismo, subrayó que de momento no se contempla autorizar un aumento en la tarifa de los urbanos “primero que mejore el servicio, que cambien los autobuses y luego veremos”, sostuvo.
Por otro lado, y sobre la difusión de la inversión de 2 mil millones de pesos en la integración del Plan de Movilidad, indicó que se contemplan 1,300 millones para infraestructura y 700 millones para la renovación de la flota por parte de los concesionarios.
La infraestructura contempla la construcción de estaciones, paraderos, terminales, patios de encierro y cierre de circuito; el proyecto ejecutivo está siendo elaborado por la Secretaría de Obras Públicas (SOP) y se espera ponerlo en marcha el próximo año, a fin de concluir su implementación en un plazo máximo de dos años. La inversión inicial sería de 1 mil millones de pesos.
Asimismo, dio a conocer que se contemplan carriles especiales para autobuses, a fin de que puedan circular con mayor velocidad a lo que lo hacen actualmente; circulan en promedio a 15 km por hora, quieren que esa velocidad promedio aumente a 18 km por hora y luego a 20 km por hora, lo que implica aumentos de 20 y 12 por ciento, respectivamente.