La depresión tropical Once-E se ha convertido en una amenaza significativa para varias regiones de México. Esta perturbación atmosférica, que se desplaza sobre el Océano Pacífico frente a las costas de Oaxaca y Guerrero, traerá consigo lluvias intensas, bajas temperaturas y condiciones peligrosas para este fin de semana.
Las autoridades nacionales y locales ya han emitido alertas, recomendando a la población tomar precauciones. A continuación, se detalla el impacto previsto, los estados más afectados y las acciones a seguir para protegerse ante este fenómeno.
Trayectoria e impacto esperado
La depresión tropical Once-E ha mantenido una trayectoria estable hacia las costas del sur de México, principalmente en los estados de Oaxaca, Guerrero y Chiapas. Según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), existe un alto potencial de que esta depresión evolucione a tormenta tropical en las próximas horas. Las regiones del Istmo de Tehuantepec, la Costa y la Sierra Sur son las más vulnerables a lluvias torrenciales y deslaves debido a la intensidad del sistema.
Se esperan vientos fuertes, oleaje elevado y posibles trombas marinas en las zonas costeras. La población de estas áreas debe estar alerta, ya que las lluvias podrían generar desbordes de ríos, inundaciones y cortes de caminos. En respuesta, autoridades locales han suspendido actividades escolares en varios municipios y activado protocolos de emergencia para evitar accidentes.
Estados más afectados
La influencia de la depresión tropical Once-E se sentirá de manera diferenciada a lo largo del territorio mexicano, afectando tanto con precipitaciones como con bajas temperaturas. Las regiones con mayor impacto durante el fin de semana incluyen:
- Oaxaca y Chiapas: Se prevén lluvias extraordinarias superiores a los 250 mm, especialmente en las regiones costeras e istmeñas, con alto riesgo de inundaciones y deslaves.
- Guerrero: Lluvias intensas que podrían alcanzar hasta 150 mm, con riesgos similares de afectación en zonas montañosas y cercanas a ríos.
- Veracruz y Tabasco: La interacción entre la depresión tropical y el frente frío número 4 podría generar precipitaciones intensas, afectando también la infraestructura local.
- Zonas montañosas del norte y centro de México: Estados como Chihuahua, Durango y el Estado de México podrían experimentar temperaturas cercanas a los 0 grados, acompañadas de lluvias moderadas.
Recomendaciones de seguridad
Ante la llegada de la depresión tropical Once-E, es crucial seguir una serie de recomendaciones emitidas por Protección Civil y el SMN para evitar riesgos:
- Monitoreo constante: Mantenerse informado a través de los canales oficiales sobre la trayectoria del fenómeno y las alertas emitidas por las autoridades locales.
- Evitar zonas inundadas: No intentar cruzar puentes, ríos o arroyos que presenten crecidas repentinas. Las inundaciones pueden llegar a desbordar cauces rápidamente.
- Localización de refugios temporales: Identificar los refugios más cercanos en caso de evacuaciones. Las autoridades locales suelen habilitar escuelas, centros comunitarios y otros edificios públicos como refugios en emergencias.
- Resguardarse en zonas altas: En áreas de riesgo de deslaves o inundaciones, es recomendable desplazarse a zonas más seguras y seguir las rutas de evacuación indicadas.
- Almacenamiento de suministros básicos: Preparar agua potable, alimentos no perecederos y medicinas para garantizar una estancia segura en caso de emergencia.
Posibles consecuencias
La depresión tropical Once-E no solo traerá consigo lluvias y bajas temperaturas, sino que también podría provocar afectaciones económicas y sociales en las áreas afectadas. La interrupción de actividades económicas y la suspensión de clases en múltiples municipios son solo algunas de las medidas preventivas que ya se han implementado.
Además, el impacto en la agricultura y la infraestructura de estas regiones podría ser significativo, con pérdidas de cosechas y daños en caminos y puentes. Ante este escenario, las autoridades continúan monitoreando de cerca la evolución del sistema y evalúan posibles acciones para mitigar sus efectos.
La depresión tropical Once-E representa un desafío para varias regiones de México. Su evolución y trayecto hacia el territorio nacional exigen que la población y las autoridades se mantengan alerta y preparadas para enfrentar sus efectos. Con lluvias intensas, riesgos de deslaves y posibles inundaciones, es crucial seguir las recomendaciones oficiales y priorizar la seguridad en todo momento.