Las transformaciones que recientemente se han dado en materia fiscal han sido numerosas: desde una reforma que otorga mayores facultades a la autoridad para comprobar los ingresos y deducciones de los contribuyentes, hasta el desarrollo de tecnologías de la información que permiten optimizar la declaración de impuestos y facturar de forma electrónica; sin embargo, algunas de las medidas implementadas también trajeron consigo un sinnúmero de controversias, ligadas al escrutinio exhaustivo de las autoridades.
¿De dónde surgen las controversias fiscales?
Manuel Llaca, socio líder de la Práctica Legal de KPMG México, explica que, junto con la reforma fiscal de 2014, se dieron una serie de modificaciones en esta materia, las cuales ampliaron las facultades de fiscalización y establecieron nuevas herramientas que le permiten a la autoridad tener un mayor espectro en los actos de fiscalización, así como en el combate de prácticas agresivas de los contribuyentes.
“Yo visualizo que en el 2018 uno de los temas fiscales más controversiales será el artículo 69-B del Código Fiscal de la Federación (CFF), debido a que está generando un sinnúmero de debates en todo el país con respecto a la detección de operaciones inexistentes”, menciona el abogado fiscalista.
En México, se volvió una práctica recurrente, por parte de algunos contribuyentes agresivos, comprar facturas para deducir impuestos, lo cual erosionó las contribuciones y con ello, el erario. El socio líder de KPMG destaca que, dentro de esta situación, la persona que otorgaba la factura no acumulaba el ingreso correspondiente y quien las compraba deducía impuestos, generando miles de millones de pérdidas al fisco federal. “Es una práctica muy agresiva, muy tóxica, que perjudica al país y al gasto público”, detalla.
Con el fin de evitar este tipo de acciones, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) generó el artículo 69-B en el CFF. Éste le otorgó la facultad de examinar la veracidad de las facturas emitidas y hacer un dictamen sobre si se prestó en realidad un servicio o se vendió un bien.
Manuel Llaca dice que una de las controversias más comunes en este caso es la complejidad que existe para demostrar la prestación de un servicio. Documentar este tipo de transacciones se vuelve muchas veces complicado y al no poder sustentarlas, la autoridad lo cataloga como una operación inexistente.
“Esta facultad de comprobación se podría llevar al extremo porque es aplicada a todos. En algunos casos, puede no atacar directamente a quienes se dedican a comprar facturas; lo estaría aplicando a empresas que están pagando impuestos. Si la autoridad concluye que no pasa ese comprobante fiscal, queda de manifiesto que es una operación inexistente, aunque no sea así”.
Esto tiene como consecuencia la realización de muchos procedimientos ante autoridades como Prodecon (Procuraduría de la Defensa del Contribuyente) o juicios ante tribunales. La forma de ejercer la comprobación se ha vuelto un ejercicio que debe ser desarrollado de forma minuciosa, ya que pasa a través de un gran número de herramientas ─muchas de ellas electrónicas─ y puede determinar situaciones fiscales que generan controversias.
Rumbo a una conciencia fiscal
Caer en una controversia fiscal puede significar mucho tiempo y dinero, por ello es necesario seguir las recomendaciones que los expertos brindan. Hay muchos aspectos que deben ser abordados en este tema y que a más de un empresario le serán de utilidad.
Octavio Rábago, socio de Impuestos y líder de la Oficina Aguascalientes de KPMG México, dice que junto con el desarrollo tecnológico en el ámbito fiscal, el monitoreo es muy exhaustivo. Por eso, el empresario debe empezar a crear conciencia fiscal.
“La parte central es la conciencia fiscal. Si no queremos estar dentro de una situación de este tipo, es importante comprender qué rubros evalúa la autoridad y cumplir con lo que se pide, dándose a notar como un empresario comprometido con este orden”, refiere el líder de la Oficina de Aguascalientes.
Algunas de las recomendaciones que da son:
- Adoptar una cultura preventiva en el orden fiscal.
- Contar con una mejor documentación para comprobar el bien o servicio adquirido.
- Al ser una empresa que recibe comprobantes de sus proveedores, es importante conocerlos bien y verificar su condición fiscal.
- Estar al pendiente de las listas que publica el SAT.
- Saber a quién acudir en caso de una controversia y qué documentación mostrar.