Por María José Valdez Martínez
Co-fundadora 02X y Venture Studio México
Un empresario hidrocálido alguna vez me dijo que la clave para crecer en cualquier actividad que desempeñas es enfocarte siempre en hacerlo lo mejor que puedas, sea cual sea la tarea; no debes enfocarte en exigir ese crecimiento o cambiar de tarea continuamente hasta lograrlo. Un simple ejemplo sería si eres el encargado de ordenar el inventario, entonces debes ser el mejor que ha existido, investigar cómo hacerlo mejor, cómo puedes mejorar el proceso, cómo puedes hacerlo más eficiente, no únicamente conformarte con hacerlo como se supone que debe hacerse.
Inculcar esto a tus hijos, empleados, compañeros, es lo mejor en lo que puedes invertir, todo lo que hagas hazlo lo mejor que puedas. Las personas que destacan en lo que hacen son aquellas que son reconocidas, no las que sólo piden crecer, o ven lo que los de un lado están haciendo.
Normalmente a los empleados no se les da un aumento porque lo piden, si no todo sería muy sencillo para todos. Se da un aumento o ascenso a aquallos que se busca mantener en la organización, reconocer y dar cada vez más responsabilidades. Si piensas en los casos de éxito que admiras, ponte a pensar cómo es que llegaron ahí y todos tendrán ese aspecto en común, destacarse, desde la actividad más sencilla hasta quien descubrió el hilo negro.
¿Quién no ha escuchado de Starbucks? No fue únicamente una persona con una buena idea de negocio. La familia de Howard Schultz no tenía dinero para pagarle la universidad, por lo que trabajó duro para ser reconocido en fútbol, consiguiendo así una beca deportiva que le permitió continuar estudiando arduamente para después trabajar en algunas empresas y terminar siendo contratado como CEO de Starbucks, y con él a la cabeza lograron pasar de 50 cafeterías a 16 mil.
Amancio Ortega, fundador de Inditex, comenzó trabajando en una mercería, y su esposa era la mejor costurera, Rosalía Mera, ambos lograron elaborar sus propias prendas hasta fundar la primera tienda Zara.
Ralph Lauren vendía guantes y corbatas para después crear su propia empresa aprovechando la buena relación que creó con todos los fabricantes. Posteriormente fue ampliando su gama de productos hasta llegar a lo que es hoy en día.
Los deliciosos panes de Tere Cazola, quien dice que empezó únicamente con una licuadora y su horno, cocinaba para surtir pedidos de familiares y amigos y con ello ganarse un dinero extra, ahora cuenta con 28 sucursales.
¿Qué tienen en común estos casos? Que todos se esforzaron en ser los mejores en lo que hacían. No importa si crees que lo que haces jamás llegará a tener éxito, porque no es así. Seas estudiante, empleado, gerente, director, deportista, emprendedor, si te decides por ser el mejor en ello, el éxito en el 2020 y en los años posteriores se dará por sí sólo. Si tus acciones hablan por ti, jamás tendrás que exigir lo que crees que mereces.