De acuerdo a los datos de asociaciones de mujeres empresarias, el 17.8% de las mujeres líderes de una empresa en México ofrecen productos o servicios únicos en el mercado, algo que las hace obtener el título de “innovadoras”.
Innovador es el concepto con el que podemos describir la trayectoria de Clara Leticia Serment Cabrera, empresaria potosina que se encuentra al frente de una de las marcas más icónicas en el estado “Botanas Provi”, convirtiéndose actualmente en la “protagonista de una deliciosa tradición”.
Tres décadas cosechando experiencias
Hace más de 30 años, Leticia Serment tuvo que tomar una de las decisiones más importantes en su vida profesional, que ponía sobre la balanza el seguir desarrollándose como estomatóloga o bien tomar las riendas del negocio familiar que se encontraba en crecimiento.
Recién egresada de la Facultad de Estomatología de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), comenzó a laborar en su propio consultorio, una dinámica que compartió simultáneamente en la gestión de la empresa familiar por algunos años.
No obstante, tiempo después, Leticia Serment optó por involucrarse de lleno al emprendimiento de sus padres, derivado de circunstancias familiares que demandaban su atención de tiempo completo en el negocio, por lo cual, asumió con responsabilidad la dirección de Botanas Provi.
Este giro en su trayectoria, la llevó a especializarse ahora en otras áreas, como en temas fiscales, reglamentaciones y lineamientos de operación, certificaciones, así como en el desarrollo de nuevos productos e innovación, pues destaca que la preparación constante es la clave para garantizar el éxito de los objetivos.
“No te puedes sentar detrás de tu escritorio pensando que lo sabes todo porque tienes 30 años en el negocio. Mi lema es ‘Mejora Continua’ en todos los aspectos profesional, personal, espiritual, creo que si nos enfocamos en ello crecemos día con día”, expresa.
“Empresa pequeña con gran futuro”
De primera mano, Leticia Serment comenta que el negocio familiar surgió desde la cocina de su madre, Clara Cabrera, a mediados de la década de los sesenta, donde el año 1969 fue el momento en el que oficialmente se pusieron los productos a la venta.
El trasfondo de esta iniciativa, tiene como origen a la señora Clara Cabrera como una apasionada por la convivencia familiar, quien compartía el producto en celebraciones y reuniones de su colonia.
Devota además de la Divina Providencia, decidió nombrar su marca con la contracción de este concepto, dando como resultado “Botanas Provi”.
Esto significó el inicio de un sueño, que tuvo como principal punto de venta un pequeño local en la casa que habitaba la familia Serment Cabrera. El peculiar sabor y su forma casera de elaboración, posicionaron rápidamente al producto en el gusto de las y los potosinos.
“Al inicio se compraba en la puerta de la casa, en algunos bares y centros deportivos, y poco a poco fue creciendo a pequeños comercios, aunque las venta principal seguía siendo un pequeño local en la salida de la casa”, recuerda.
Detrás de la producción
Sin etiquetas, tecnología y grandes herramientas de producción, el producto que en un inicio sólo eran papas fritas, se convertía en una original opción que nunca perdió su calidad. Este hecho consolidó las raíces de Botanas Provi.
Cinco décadas después, la oferta se ha diversificado, y tras el objetivo de Leticia Serment de crecer la empresa, apostó desde su liderazgo por la integración de nuevos personajes a la escena comercial.
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Actualmente cuentan con:
- Cuatro variedades de papas fritas (sal, jalapeño, adobadas y queso)
- Distintos tipos de cacahuates
- Productos a base de maíz como churro verde y rojo, totopos
- Chicharrón de cerdo
- Habas
- Mix de estos productos
Desde su fábrica ubicada en la carretera a Zacatecas en la capital potosina, al día de hoy se producen cien toneladas mensuales, y emplea a más de 200 colaboradores.
Su marca también ya ha traspasado fronteras, pues ahora se le puede encontrar en plazas comerciales, tiendas de conveniencia, restaurantes, bares y sucursales propias, no solo en el estado, sino en otras regiones.
“Actualmente tenemos presencia en Querétaro, Guanajuato, Zacatecas y Aguascalientes, aunque también hemos recibido propuestas para comercializar nuestro producto en otros estados”, comenta.
Una misión como empresaria
La vocación inherente de Leticia Serment hacia el sector empresarial potosino es un referente del género y símbolo de empoderamiento para quienes, como ella, han contribuido en el desarrollo económico de la entidad.
Prueba de ello es que, desde hace 30 años, ha participado activamente en distintos Consejos empresariales y de atención ciudadana, además de programas altruistas y de apoyo a su comunidad.
El principal reto, refiere, fue el de abrirse paso en un espacio que por muchos años, lideraban los hombres, sin embargo, a lo largo de ese camino, encontró el apoyo de sus colegas, quienes la impulsaron a destacar en este sector.
“Siento que he picado piedra en cuanto a participar como mujer en diferentes espacios tradicionalmente masculinos, y quiero agradecer a mis compañeros y amigos la apertura y el respeto que siempre he recibido”, expresa.
Este ímpetu apalancado además desde el seno familiar, con su esposo, hijos y ahora nietos, le brindó a Leticia Serment la fortaleza para lograr cada uno de sus éxitos.
Uno de los más destacados, relata, fue llegar a la presidencia de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (CANACINTRA), San Luis Potosí, para el periodo 2019-2020, uno de los puestos más satisfactorios que le ha tocado desempeñar.
Cabe destacar que hace más de 20 años, marcó la pauta al ser la primera consejera mujer en esta asociación, así como vicepresidenta, donde uno de sus objetivos fue ofrecer igualdad, sobre todo en temas económicos.
Referente para nuevas generaciones
“Me encanta lo que hago y me encanta participar, siento que al participar estoy abriendo espacios para las que vienen detrás de mí”, relata.
Leticia Serment se encuentra convencida de que el origen de cualquier meta es soñar en grande. Es posible que como mujer se llegue a puestos de liderazgo si se trabaja arduamente para conseguirlo.
En ese tenor, recomienda a las nuevas generaciones de empresarios y empresarias, a dirigirse con igualdad de condiciones en miras de construir oportunidades para todas y todos.
