Luego de un excelente fin de semana en el Principado de Mónaco –uno de los premios más icónicos de la Fórmula 1– Sergio “Checo” Pérez gana la carrera, convirtiéndose en el primer mexicano y quinto latino en concretar esta hazaña.
“Después de la carrera en casa, esta es la carrera que uno siempre quiere ganar”, declaró el piloto nacional.
En una carrera sumamente estratégica por la lluvia que cayó horas antes del arranque, el mexicano coronó un excelente fin de semana donde registró los números más rápidos –tanto en las sesiones de práctica, como en la clasificación–.
Checho Pérez largó en el tercer puesto de la parrilla pero, conforme la pista se fue secando, fue uno de los primeros autos en cambiar a neumáticos intermedios lo que –luego de una mala estrategia de Ferrari en el box– lo colocó como líder de la carrera.
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Tras un aparatoso accidente de Mick Schumacher que causó una bandera roja (señal que pausa la carrera), la competencia se definió contra reloj y con el máximo de dramatismo, ya que el mexicano tuvo que defenderse de un ferrari con neumáticos en mejor estado.
El tapatío conmemoró a Pedro Rodríguez, piloto mexicano a quien rindió tributo en el casco que usó este fin de semana. En la ceremonia de premiación, el Checo Pérez entre lágrimas entonó el himno nacional mexicano.
“Pedro Rodríguez estará muy orgulloso por lo que hemos logrado en el día de hoy”, concluyó.