Escrito por Fernanda de Alba
En los últimos años las empresas han dedicado sus esfuerzos a entender los gustos y comportamientos de la generación millennial, que comprende a las personas que nacieron entre 1980 y 1995, de acuerdo con Mangroup. Se ha hablado mucho de ellos, pero en este 2018 deben comenzar a estudiar el comportamiento de otra generación que toma cada vez más fuerza: la generación Z.
La generación Z comienza con las personas que como yo nacimos en 1995 y actualmente estamos saliendo de las universidades para ingresar en el mundo laboral. Somos aquellas personas que empezamos a tener una participación activa en la economía, la sociedad y el mundo empresarial.
Los jóvenes Z nos caracterizamos por ser independientes, buscar información On Demand, utilizar varias pantallas a la vez, procesar información con mayor rapidez que otras generaciones y buscar productos en internet antes de comprarlos. En este sentido, Business Insider divulgó que nuestra generación se inclina más al e-commerce que otras.
Aunque muchos de nosotros fuimos testigos del cambio a la era digital y pasamos nuestra infancia viendo caricaturas en la televisión y a nuestros padres comprar el periódico cada mañana, actualmente vivimos sumergidos en un mundo digital en el que nuestro smartphone es esencial y la tecnología es parte de nuestro día a día.
Confiamos más en el consejo de amigos o extraños que en el de figuras de autoridad, organizaciones o marcas en redes sociales, de aquí es de dónde nacen los llamados “influencers” quienes a través de los medios digitales venden un estilo de vida y recomiendan ciertas marcas o productos.
Somos una generación que da like o sigue a marcas que representan nuestras ideas, no nos gusta que nos vendan productos de forma tradicional y no creemos en los comerciales de televisión. Nos gusta que las marcas conecten con nosotros a través de redes sociales y que la comunicación sea personalizada.
Somos una generación que se caracteriza por tener un “espíritu emprendedor”. A diferencia de los millennials quienes gastan todo su dinero en seguir sus sueños, los centennials estamos más enfocados en nuestras finanzas y somos cuidadosos con nuestro dinero.
Según un artículo de Harvard Business Review,en el 2015 el 70% de los adolescentes eran auto empleados, ya fuera dando clases de piano, vendiendo algún producto por eBay, etc. Los adolescentes han dejado de tener los tradicionales puestos de trabajo en locales de comida rápida, cinemas o cafeterías, y han cambiado su visión de trabajo. Asimismo, la firma de consultoría Sparks and Honey encuestó a 90 mil jóvenes de la Generación Z. Los resultados revelaron que el 40% contemplaba establecer su propia empresa.
Según Gallup Poll, 8 de cada 10 niños quiere ser su propio jefe y 4 de cada 10 quiere tener su propio negocio. Esto se debe a plataformas de crowdfunding y a la visión global de la generación Z en la que la tecnología no los limita a tener un negocio físico. Podemos comprar, vender y distribuir a todas partes del mundo gracias a plataformas como Amazon, Mercado Libre, Facebook o eBay.
Los centennials somos personas prácticas y realistas, pero sobretodo innovadoras. Nos sentimos bien con la creativad y pensamos de forma disruptiva. En el mundo tan competitivo que crecimos nos hemos visto obligados a diferenciarnos y a innovar de maneras distintas que otras generaciones. Somos una generación que llega al 2018 tomando protagonismo y cambiando la perspectiva del trabajo.