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Calvillo gran exportador de guayaba… y de migrantes.

Por Paola Nadine Cortés Calzada

Pintoresco y mágico, Calvillo, mejor conocido como “Capital Mundial de la Guayaba”, se encuentra a al suroeste del estado abrazada por la Siera Fría. Es uno de los municipios con mayor extensión territorial en Aguascalientes, además de gozar de una hidrografía de las más bastas; y por supuesto, ser la cuna del deshilado, símbolo de orgullo e identidad de la “Bona Gens”.  Eso y  tantas cosas más ofrece esta tierra de gente noble.

Sin embargo, es también un municipio alejado de la decimotercera zona metropolitana en nuestro país (Aguascalientes, San Francisco de los Romo y Jesús María); está fuera del corredor industrial del Estado y alejado de la vía principal en México y por supuesto en Aguascalientes: la carretera Panamericana que tiene una dimensión aproximada de 48.000 km de largo y vincula a casi todos los países del Continente Americano con un tramo unido de carretera, una gran vía que como si fuese el Rey Midas todo lo convierte en oro a su paso.

Calvillo además se ha consolidado como un municipio expulsor de migrantes, quienes siguiendo la nueva teoría neoclásica de las migraciones, han sido la fuente crediticia  que ha necesitado para salir adelante ante catástrofes, pobreza, enfermedades renales crónicas y sobre todo, solventar aquello a lo que no tienen acceso con el salario mínimo, que para el caso de México, es insuficiente respecto de la canasta básica.

 Calvillo y sus Migrantes

Municipio con incidencia migratoria muy alta a nivel nacional, encabezando la lista a nivel Estatal respecto de la densidad poblacional pues el 15.7% de los migrantes del Estado es nacido en Calvillo. Esto quiere decir que Calvillo, en el estado, es el principal expulsor de migrantes con destino a Estados Unidos, lo que significó el ingreso de 77 millones de dólares en remesas durante el año 2016.

Además de las remesas, los migrantes de Calvillo son  son factores de crecimiento. A través del Programa 3×1 para Migrantes, que es de participación federal con el cual han beneficiado con Internet en el 80% de la población a menor costo, cubriendo el 45% del costo total; con ambulancias equipadas y seminuevas; lograron la Agenda Migrante en conjunto con el Consulado de EUA en Guadalajara; gracias a la multiplicidad de proyectos sostenidos con remesas, 23 casas de salud paramédicos se vieron beneficiados con equipamiento; solventan costo de estudios para enfermedades renales y el cáncer; y otorgan 2000 becas educativas anuales en promedio (desde estudios básicos hasta universitarios).

En fin, su ayuda es extensa, y no merecen más que respeto por su gran labor.

¿Reciprocidad?

 En Calvillo los migrantes no corrieron la misma suerte que los servicios de cafetería en oficinas gubernamentales que se vieron beneficiados con un aumento presupuestal de casi 29 mil pesos mientras que la Atención al Migrante tuvo una reducción de 10 mil pesos respecto  2016, destinando en total $167,682.78 para el ejercicio fiscal del 2017. No hay lógica en la distribución de recursos públicos, porque si la hay, entonces la escala de prioridades está perdida.

Nos falta mucho por construir en torno a las políticas públicas en materia de migrantes: son inexistentes y es necesario que se generen, es necesario que tomemos la misma responsabilidad que nuestros migrantes, es una obligación no soltarlos y crear mecanismos de retorno voluntario y de inversión de remesas.

Para un municipio como Calvillo su eje principal debe ser la generación de políticas no solo sociales, sino de compensación, contención y retorno de migrantes de una manera ordenada, segura y responsable.

A nivel federal existe la coyuntura estructural para el desarrollo de programas focalizados en materia de migrantes y sus familias; eventualmente esto se verá potencializado con la aplicación a priori de la Ley de Protección a Migrantes, que como espíritu, encierra la salvaguarda de los derechos humanos de los migrantes y sus familias, por lo cual la reglamentación de la misma es la clave procesal que abrirá las puertas a una política pública responsable.

Los municipios como Calvillo tienen desde ya la gran responsabilidad de no permitir que la ley sea letra muerta como lo fue el 45 de 45 del plan de desarrollo municipal donde puntualmente se compromete a la creación de nuevos Clubes de Migrantes en EUA mismos que a la fecha no han sido creados.

A menos de 50 días de que se cumpla el plazo para la publicación del Reglamento de la Ley de Protección al Migrante para el Estado de Aguascalientes, Calvillo deberá ser principal impulsor y desarrollador de mecanismos en pro de sus migrantes y con ello dar muestra plena de reciprocidad.

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