La entrada de Joe Biden a la presidencia de Estado Unidos traerá cambios en el sector económico y en lo que respecta a las relaciones comerciales entre los países con los que se relaciona. A su entrada ya se vislumbra la política económica denominada Buy American, la cual tiene como propósito disminuir el consumo de productos de China.
Esta política presenta dos perspectivas para México, una favorable y otra perjudicial. Si bien, la propuesta de Biden busca generar un mayor consumo local, afectando directamente a China, a un mediano o largo plazo podría afectar a sectores de nuestro país.
La estrategia económica postula lo siguiente:
- Invertir en la demanda de productos, materiales y servicios estadounidenses
- Revitalizar a fabricantes estadounidenses, enfatizando a los más pequeños
- Invertir en tecnologías innovadoras para crear empleos en manufactura y tecnología de alta calidad
- Asegurar inversiones que lleguen a Estados Unidos para invertir en el potencial de comunidades
- Estrategia comercial y fiscal para dar competencia justa a fabricantes y trabajadores
- Devolver las cadenas de suministro críticas de Estados Unidos para no depender de otros países.
Si bien estas prácticas no se llevarán a cabo de manera inmediata, el proceso paulatino por el que se pasará puede tener un impacto positivo en México, ya que se puede aprovechar el rechazo hacia China para proveer al país vecino tomando como ventaja la cercanía geográfica y la producción manufacturera que en un principio no podrán abastecer por sí mismos.
Los problemas vendrían después, a largo plazo, si es que se llevan a cabo todos los puntos expuestos anteriormente. Actualmente la industria mexicana ya toma ventaja de la situación conflictiva entre EE.UU y China, tratando de captar lo más posible de inversión para hacer crecer las oportunidades en el país.
Por otro lado, a través del T-MEC se pueden buscar soluciones integradoras que no logren afectar los pactos comerciales que esta nueva estrategia podría traer consigo. Se pueden conseguir avances y certidumbre si se logran propuestas de integración de cadenas de proveedurías.
Así lo señalaron expertos en la materia: José Luis de la Cruz, presidente de la Concamin; Ernesto O´Farriel, presidente de Bursamétrica; y Adán Sada Cueva, presidente de la Caintra Nuevo León.
Intercambio entre México y Estados Unidos: un breve panorama
Durante el 2020, de enero a noviembre, los intercambios entre México y Estados Unidos lograron ascender a 488,849 millones de dólares, representando el 14.3% del comercio total de EE.UU con el mundo. Este porcentaje sólo fue superado por China, con un 14.7% del total.
Estados Unidos compró a México el 13.9% del valor total de sus importaciones, según indicó la Secretaría de Economía. Por otro lado, las compras realizadas a China representaron el 18.6% del valor durante este lapso.
Si se llevan a cabo acciones acertadas y concisas, la industria podría beneficiarse durante los próximos años. La dualidad del impacto para México que puede traer el Buy American presentan matices que pueden tomarse como rutas de solución.