Desde 2012, el Grupo Financiero Banorte analiza los riesgos sociales y ambientales. Esto los llevó a un primer reto: cuantificar las emisiones de carbono de su cartera y establecer metas de descarbonización para 2030 y 2050.
José Luis Muñoz, director ejecutivo de Sustentabilidad y Relación con Inversionistas de Banorte, enfatizó que el financiamiento sustentable llegó para quedarse. Como parte de las estrategias aplicadas por la institución se encuentra el crédito “Autoestrene verde”, diseñado para incentivar la compra de automóviles híbridos o eléctricos.
También está la “Hipoteca Verde”, que se otorga para la compra de a inmuebles con certificaciones (EDGE y LEED) que acreditan su construcción con materiales sustentables y con un menor consumo de electricidad o energético y de agua.
Acciones de responsabilidad social en Banorte
Como parte de su responsabilidad social, lanzaron “Mujer Pymes” para incorporar a las mujeres empresarias de México, ya sea a las dueñas de empresas o aquellas empresas con mayoría accionaria de mujeres.
“El reto que estamos viviendo actualmente y que vamos a seguir con él en 2030 y 2050 va a ser cómo descarbonizar esa cartera, cómo ayudar a nuestros clientes, que su operación tenga menores emisiones y que tenga mayor impacto positivo, ambiental y social”, remarca.
Además de estas acciones sustentables, Muñoz señala que recientemente emitieron su primer bono sustentable para el financiamiento de proyectos con impactos positivos en comunidades. Actualmente, ya se identificaron proyectos para 70% de los recursos captados en esta emisión.
“Se han transformado los tipos de riesgo que tenemos que evaluar para incorporar el riesgo social, el riesgo ambiental y las emisiones de huella de carbono en nuestra cartera”.
Para Muñoz, algunos de los desafíos abarcan la capacitación de la fuerza de venta y el acompañamiento a los clientes para que identifiquen sus oportunidades y transicionen a una operación cada vez más sustentable.