Basar la recaudación en la confianza o desaparecer los inspectores del SAT y otras dependencias federales, podría no ser la mejor medida, aunque habría qué analizar cómo pretende implementarse, consideró el presidente del Colegio de Contadores Públicos de Aguascalientes, Octavio Rábago Franco.
Luego de que el Presidente Electo anunciara que emitirá la iniciativa de Ley de Responsabilidad Ciudadana -que considera la eliminación de la figura del inspector en todas las dependencias, partiendo de la confianza del gobierno hacia los contribuyentes-, el especialista consideró que se trata de una medida que de entrada suena complicada, por lo que habría que esperar su implementación.
Rábago Franco señaló que es preciso reconocer que la autoridad fiscal ha avanzado en forma importante en el establecimiento de sistemas que conllevan la detección de “factores de riesgo”, así como en la capacitación del personal, de manera que se trata de dos vertientes que han ayudado al SAT a realizar sus labores de fiscalización de una más inteligente, menos costosa y más rápida.
En este sentido, y en torno a la posibilidad de basarse en la buena voluntad del contribuyente, mencionó que “desafortunadamente estamos en México, y sabemos que hay muchos contribuyentes que no están contribuyendo en la manera en que deben hacerlo”, expuso, además de advertir que el hecho de quitar supervisores, revisores, inspectores o autoridades, puede ir en contra de todo lo que se ha avanzado.
En entrevista con Líder Empresarial, refirió que si bien es cierto tener confianza puede ser bueno, a veces es mejor no tenerla en ciertas áreas.
“Es un punto medular para el país; si se inicia con este plan y luego se cae la recaudación, quien lo va a padecer principalmente es el gobierno y las distintas dependencias. Habrá que ver cómo va evolucionando, y si es que efectivamente se maneja así, pero creo que bajar la guardia en cuanto a lo que se ha venido haciendo, va a ser un retroceso”, agregó.
El contador mencionó que los sistemas que ha venido implementando el SAT han derivado en incrementos en la recaudación, la cual es además una más eficiente, porque están gastando menos por cada peso que recaudan.
“Son muchos años de trabajo, de inversión. Están empezando a verse los resultados, es un tema que habrá que cuidar”.
Finalmente, mencionó que como profesionistas son optimistas y positivos de cara al cambio de gobierno que se avecina, sobre todo porque el país trae consigo una buena inercia económica a lo que se suma la firma del nuevo acuerdo comercial con Estados Unidos y Canadá, lo que da cierta estabilidad, sobre todo a la zona del bajío que depende en gran medida de la industria automotriz, que es una de las áreas consideradas como estratégicas.
“Si bien puede existir la incertidumbre de un gobierno nuevo, diferente, de izquierda, hay condiciones favorables para que el país siga su marcha”.