Lo que debes saber para dejar que un experto se encargue de tu boda
Planear una boda es cosa de locos si eres el que se va a casar. Lo vemos retratado en películas, series, revistas; pero sabemos que es real: basta con preguntar a quien ya ha pasado por esta experiencia. Afortunadamente, existen personas dedicadas a hacer que uno de los momentos más importantes de nuestras vidas sea lo más sencillo posible: los planificadores de bodas.
Aunque dejar en manos expertas la logística de un día tan especial puede causar nervios a muchos, en realidad es una sabia inversión. Para aquellos que dudan un poco de los servicios de estos profesionales, detallamos un poco su trabajo; para quienes ya están convencidos, este artículo podría hacerlos sentir más seguros sobre su decisión.
Un breve vistazo a lo esencial para planear una boda
“Si quieres disfrutar de tu boda, lo mejor que puedes hacer es contratar a un planificador de bodas”, dice Daniel Velázquez, arquitecto y director de Davento, empresa dedicada a la planificación de banquetes y eventos sociales.
Tiene razón: encargarse de que la decoración, comida, servicio, música y demás estén coordinados no es tarea fácil; sin embargo, lo más importante en este negocio para destacar, a su parecer, no es el ser organizado y bien administrado, sino ser creativo. Su formación profesional le ayuda bastante con esto: tiene el conocimiento de diseño y tendencias.
“La arquitectura me hace tener una visión del espacio; al final de cuentas, se trata de crear una arquitectura efímera, algo que se monta un día y a las pocas horas se desmonta”, comenta Daniel.
Hay aspectos básicos que se deben tener en cuenta para planear una boda. Lo primero que hace Daniel cuando un cliente lo busca es hacer una pequeña entrevista para conocer esos aspectos. Por ejemplo, si quieren que sea en el día o en la noche, en exterior (jardín con o sin toldo, terraza) o interior, número de invitados, etcétera.
Para cada locación y hora del día hay que tener algunas consideraciones. Si es una boda de noche, la decoración puede llevar velas, flotantes, peceras y objetos que creen un ambiente más romántico y elegante. Una boda de día puede prestarse más a lo relajado, a los caminos de flores, brindis bajo un árbol…
Con base a la idea que tiene la pareja, Daniel hace una propuesta. “Por lo regular, no busco hacer lo que me diga el cliente al pie de la letra, sino proponer cosas nuevas, sustentadas en mi experiencia y el gusto por el diseño”, explica.
Aunque la decoración y el montaje son parte esencial del éxito de una boda, para este planificador hay aspectos que no deben descuidarse jamás: un buen servicio, es decir, puntualidad en la organización, atención a los invitados (no hacerlos esperar por bebidas o comida), la calidad del montaje y, sobre todo, que estos elementos estén bien coordinados.
“Lo indispensable es pensar cómo quieres que suceda el primer baile con tu pareja y cómo quieres guardar el recuerdo para toda tu vida”, menciona Daniel. Ya sea un brindis bajo un árbol con las personas que más quieres o una fiesta temática en el más elegante de los salones, lo mejor siempre será dejar este día en manos expertas.