La cuarentena, provocada por el Covid-19, se ha terminado para distintos países; así que la recuperación de las actividades cotidianas se ha hecho de forma paulatina. El retorno presencial a los centros educativos ha diferido según los protocolos de sanidad, en algunos países se acude a las aulas con equipo de protección, en otros se ha suspendido la modalidad hasta nuevo aviso. Aquí enlistamos distintas formas en las que países de todo el mundo han procedido en favor de la salud de sus asistentes.
China
Aun cuando el regreso a clases ya se había logrado en casi la totalidad del país, la educación primaria aplazó su integración debido a un posible rebrote de Covid-19. No obstante, antes de que esto ocurriera, los alumnos acudían a los centros educativos, luego de confirmar que no tenían síntomas afines al virus antes de salir de casa, portaban mascarilla, careta protectora y guantes. Los espacios comunes eran sanitizados y se optó por el recreo escalonado.
Francia
A finales de abril, el primer ministro francés, Edouard Philippe propuso el regreso a clases obligatorio, luego el Parlamento refutó la propuesta suavizando los parámetros, considerándola como una acción voluntaria, sometida a la decisión de los padres. Para los alumnos y docentes que sí se incorporaron a clases presenciales, se crearon protocolos sanitarios restrictivos para evitar el esparcimiento del virus. Al principio se propuso una distancia de cuatro metros entre alumnos, una asistencia de máximo 15 por aula y clases sólo cuatro días a la semana, medidas que se suavizarán durante el transcurso de junio.
Nueva Zelanda
Al considerar seguro el regreso a clases, el ministro de educación, Chris Hipkins, declaró que a pesar de ser complicada la reincorporación de los niños a las aulas, la integración de todos los niveles educativos se podría realizar con base en los mismos protocolos sanitarios. Debido a las medidas de confinamiento oportunas, Nueva Zelanda logró ser de los primeros países en derrotar al virus, por lo que se dedicó a crear medidas específicas para cada sector, de acuerdo con el contexto, con filtros menos restrictivos que en otros países.
Uruguay
A inicios de junio, Uruguay empezó su regreso escalonado a clases presenciales. De manera similar a Francia, se hizo de esta medida un asunto voluntario. Primero se abrieron los centros educativos rurales, luego las primarias ajenas a la capital y por último se prevé la incorporación de escuelas públicas y privadas de Montevideo. Los filtros al ingreso constan de un cuestionario en el que se interroga al asistente de manera que se puedan identificar síntomas afines al Covid-19 y luego se procede a tomar la temperatura; el uso de cubrebocas no es obligatorio y los grupos están divididos de manera que se eviten las aglomeraciones.
Alemania
Por disposición oficial, el regreso a las escuelas se hizo con grupos reducidos y de forma escalonada. Las clases se realizan un día a la semana por un periodo menor a las 5 horas y sólo se ven “materias esenciales”. En cuanto a las medidas sanitarias, es obligatoria la distancia de 1.5 metros entre los asistentes y las áreas comunes permanecen clausuradas. El uso de cubrebocas es voluntario en las institución, mas obligatorio en el transporte público.