Esta semana se realizó el noveno y penúltimo debate demócrata previo a decidir quién será el representante del partido en las próximas elecciones presidenciales de Estados Unidos, buscando “interrumpir” la reelección del actual mandatario, Donald Trump.
El debate, realizado en Las Vegas, Nevada el pasado 19 de febrero, fue llamado por varios medios internacionales como “el más agresivo de la jornada electoral hasta el momento”; un encuentro que estuvo rodeado de críticas y tensiones entre los candidatos, quienes revelaron su presión ante un posible escenario donde no se logre un apoyo total de los demócratas para derrotar a Trump en su reelección.
Pese a que en el debate se abordaron varios temas de gran interés para la comunidad estadounidense, se destinó poco tiempo para discutir sobre la migración, una de las principales disyuntivas en la política pública de la Unión Americana.
¿Qué dijeron los candidatos?
Recordemos que hasta el momento, los candidatos del lado demócrata perfilados a la presidencia son Bernie Sanders, Michael Bloomberg, Pete Buttigieg, Elizabeth Warren, Amy Klobuchar y Joe Biden. Antes del panel, Buttigieg era el favorito de los oponentes, sin embargo, posterior la debate fue Bernie Sanders quien retomó la delantera entre las preferencias de la comunidad americana.
Pese a ello, Sanders no se libró de cuestionamientos pues su propuesta Medicare For All fue la más atacada. Entre otras cosas, los opositores criticaron que el programa pueda resultar mucho más caro de lo que afirma el senador, además de que muchos proveedores privados quedarían fuera para unificar el servicio de salud.
El debate fue una dura prueba para el candidato, quien pese a liderar las elecciones primarias, tiene en contra a un importante número de estrategas políticos que temen que sus ideas progresistas resulten un desastre en las elecciones frente a Trump.
Michael Bloomberg, ex alcalde de New York, fue criticado en demasía debido a las denuncias de acoso que tienen sus empresas por parte de varias mujeres, así como por sus infortunadas declaraciones sobre raza y género.
Amy Klobuchar fue atacada por Pete Buttigieg, después de que en una entrevista previa, olvidara el nombre del presidente Andrés Manuel López Obrador cuando se le preguntó sobre la relación de Estados Unidos con México.
Elizabeth Warren medió la discusión diciendo que habría que centrarse en los temas de política. La candidata planteó los retos de la corrupción en el gobierno estadounidense e hizo un llamado al sector privado para que los ricos contribuyan más con el país.
Buttigieg, primer candidato abiertamente gay, utilizó nuevamente un discurso promotor de una sociedad más incluyente con personas de cualquier edad, género y nacionalidad. Sin embargo, pocas propuestas formales salieron a relucir de sus comentarios en el debate.
Por su parte, Joe Biden, ex vicepresidente durante el mandato de Barack Obama, tuvo una participación neutra en el debate, no habló demasiado y cuando lo hizo fue conciso en sus puntos sin protagonizar ningún ataque.