La industria automotriz a nivel global saldría afectada negativamente en caso de que Estados Unidos y Donald Trump establezcan aranceles del 25% a la importación de vehículos y autopartes, reveló un informe de la agencia calificadora Moody’s Investors Service.
Bruce Clark, vicepresidente senior de Moody’s, alerto que dicha tarifa afectaría prácticamente a toda la cadena automotriz, desde fabricantes de automóviles, proveedores de partes hasta concesionarios de automóviles e incluso compañías de transporte.
El estudio advierte que las plantas automotrices instaladas en México, así como la economía nacional, serían de las afectadas. Moody’s Investors Service resalta que durante el primer trimestre del año, la industria automotriz contribuyó con el el 2.9% del PIB nacional.
La agencia señala que los principales fabricantes de autopartes podrian desarrollar dificultades para adaptarse a los cambios en la cadena de suministro. Prevé que los proveedores harían esfuerzos importantes para optimizar el tiempo y costo de producción, pero que esto conduciría a realizar múltiples viajes transfronterizos que podrían generar múltiples aranceles.
Por otra parte, Moody’s apunta que las plantas automotrices europeas que no se encuentren instalados en Estados Unidos enfrentarían dificultades desmedidas. Caso contrario a China, quien su exportación a Estados Unidos es prácticamente nula.
Los fabricantes japoneses también se verían en aprietos, pues compañías como Nissan o Toyota envían una parte importante de su producción a los Estados Unidos, por lo que se verían obligados a reajustar, según el informe. Caso similar al de Corea, aunque si bien marcas como Kia o Hyundai han aumentado su producción en el país norteamericano, no alcanzaría para minimizar el impacto negativo de unos potenciales aranceles.
Estados Unidos no saldría inmune de la imposición de los aranceles. De acuerdo con Moody’s, plantas como Ford o General Motors se mostrarían muy desfavorecidas, pues una importante parte de su producción es importada de Canadá y México, por lo que enfrentarían problemas para cambiar su cadena de suministro.