Amalia Dolores García Medina es zacatecana por origen, fungió como gobernadora de su estado durante el periodo 2004-2010. Tiene dos licenciaturas, Sociología por la Universidad Nacional Autónoma de México e Historia por la Benemérita Universidad de Puebla. En la actualidad es activista por los derechos de la mujer, la democracia, los derechos humanos y los derechos de los migrantes.
Desde niña ha tenido excelente relación con la literatura y el cine, lo que le permite un panorama más amplio sobre la realidad, sus matices y discordancias. Debido a sus intereses, no es de extrañar que sea una mujer informada sobre lo que ocurre en el mundo sin que compita con su interacción en el núcleo familiar.
“Somos de una familia lectora, mi padre tenía una biblioteca enorme. Soy devoradora de libros, busco lecturas que me hagan mejor persona, con más información y posibilidades de análisis. Me mantengo atenta a las noticias. Soy una cinéfila, desde muy joven reviso cuál película me parece interesante. Una parte muy satisfactoria es que reservo un tiempo para ver, abrazar a mis nietos, trato de dedicarle tiempo a mi madre que me visita muy poco tiempo porque luego se quiere regresar a Zacatecas.”
La primera gobernadora del estado
Líder Empresarial (LE): ¿Qué representa para usted ser la única gobernadora que ha tenido Zacatecas y una de las pocas en la historia del país?
Amalia García (AG): Una enorme responsabilidad. Desde el principio propuse talleres para que todo el gabinete entendiera el lugar de la mujer y las condiciones en que se desarrolla. Durante mi administración se buscó que Zacatecas tuviera presupuestos con perspectiva de género, con base en requerimientos específicos.
En el caso del gobierno, modifiqué las jornadas de trabajo, las acortamos de cierta manera que los trabajadores y trabajadoras pudieran salir más temprano para que pudieran tener una vida familiar activa, salir, convivir con sus hijos. De esta forma buscábamos fortalecer el tejido social.
LE: ¿Qué retos enfrentó al estar al frente de Zacatecas?
AG: Mi propósito principal era buscar la manera en la que el estado diera resultados, porque la gente vota con el deseo de que la persona por la que votaron dé resultados. Yo sentía esa enorme responsabilidad, hay una frase que dice “problema que no se atiende a tiempo estalla”. Primero atendí algunos problemas que encontré, como la situación crítica en la que estaba la Universidad Autónoma de Zacatecas.
Trabajé para que Zacatecas estuviera comunicada como una estrella, de la capital a los municipios, con la construcción de autopistas y carreteras, que permitiera la entrada de turismo y salida de productos. Apoyamos la tecnificación del campo zacatecano. Fuimos un estado pionero en la capacitación de niños en robótica. En todos los programas sociales, para el campo, culturales, de desarrollo, pusimos en el centro incorporar a las mujeres.
Los motores de mi gobierno eran el amor a Zacatecas y búsqueda de resultados. El sentido de urgencia era una petición recurrente en mi gabinete, la gente requería resultados inmediatos. Es difícil resumir todo en una conversación, pero es claro que todo lo que se hizo en el estado atiende a un motivo, el amor a Zacatecas. Nuestro lema era precisamente “Por amor a Zacatecas”, porque era la palabra más fuerte que expresaba lo que debía hacerse.
LE: Sobre la inclusión de las mujeres en el mundo laboral, ¿qué retos enfrentó su gabinete en materia de paridad de género?
AG: El gabinete llegó a la paridad, había retos muy fuertes para las compañeras, demostraban que tenían el liderazgo y las condiciones para impulsar al equipo de trabajo. Teníamos mujeres extraordinarias con las mismas condiciones y capacidad para aportar y desempeñarse con gran calidad. Hicimos un gran trabajo en educación, en salud e investigación.
LE: ¿Cómo se imagina a las mujeres del futuro?
AG: Mujeres con más tiempo para poder disfrutarlo, que tengan derecho al ocio, que tengan las condiciones para compartir más en las instituciones académicas, deportivas y familiares. En donde son libres porque se han erradicado las brechas incluso en el lenguaje, donde se han eliminado las bromas que también nos agreden. Donde no sólo las mujeres, sino toda la sociedad, se comunica con el lenguaje del respeto.
LE: ¿Qué necesitan los líderes zacatecanos de todas las áreas para contribuir a que el estado sea un referente a nivel nacional?
AG: Yo creo que el amor a nuestro estado debe estar presente. Tienen que actuar con profesionalismo, conocer dónde están actuando, cuáles son las necesidades, seguir una ruta con base en los objetivos que persigue. Si uno tiene una carta de navegación muy precisa y sabe cuáles son los objetivos y el rumbo que quiere seguir, podrá trabajar para tener buenos resultados. También puede no tenerlos, porque existen los imponderables, pero al tener un plan puede actuar de manera consistente.