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Almacenamiento como ruta crítica para la transición energética.

Escrito por Juan Manuel Ávila, presidente de Coparmex Aguascalientes, en conjunto con Pepe Velasco, presidente del Clúster de Energía del Estado y VP de la Comisión de Energía de Coparmex Aguascalientes.

Una de las premisas que ha tenido el gobierno federal para anteponer los combustibles fósiles ante las energías renovables es la confiabilidad en el Sistema Eléctrico Nacional (SEN), pues planear el despacho (entrega) de energía eléctrica al momento exacto cuando se consume desde una fuente que no es firme genera retos en la red sin duda alguna, sin embargo en vez de ver esto como un reto y por ende un freno hay que mirarlo desde la óptica de la oportunidad, es decir, cambiar la frase “se despacharan fuentes fósiles antes que fuentes renovables por un tema de confiabilidad” por la de “se integraran cada vez más sistemas inteligentes a la red eléctrica para poder incorporar más energía renovable”, y afortunadamente la tecnología nos ha alcanzado.

Hoy en día el utilizar Sistemas de Baterías para Almacenamiento Eléctrico o BESS por sus siglas en inglés permiten una serie de funciones que van de acuerdo a las nuevas tendencias industriales, pero sobre todo que empoderan al usuario. 

El sistema eléctrico en general fue diseñado – en todos los países- a través de proyectos que se les conoce como de escala (utility) esto es, porque la tecnología por ejemplo empleada para generar energía en una planta de diésel o ciclos combinados de gas natural no era compacta, es decir, los generadores más pequeños en algunos casos llegaban a ser de 10 Mw (considere que hay paneles solares de 100 Watts es decir se necesitarían 10 millones de esos paneles para tener una potencia instalada de uno de estos generadores – claro esta sin considerar factor de planta- luego entonces por temas de economía, recurso energético (las centrales se ponían donde el recurso estuviera más cercano y disponible, por ejemplo presas en los ríos) y no necesariamente en el lugar de consumo, esto hacía que se tuviera que invertir en líneas de transmisión para acarrear toda esa gran cantidad de energía a los puntos de consumo. 

Al día de hoy uno de los modelos de paneles solares mas comercializados es de 550 watts (5 veces el tamaño del modelo del ejemplo anterior), los inversores tienen una capacidad de transformación de la corriente que proviene de los paneles (D/C) a la corriente que utilizamos en nuestra  maquinaria, equipo, electrodomésticos, etc (A/C) mayor al 95% en promedio, y también hoy en día tenemos baterías que pueden ofrecer servicios eléctricos a la industria, como puede ser peak-shaving que es el modelo de rasurar las puntas (cargar las baterías cuando el precio de la energía es barato que es en el horario base, y descargarlas cuando se encuentra el precio más alto que es el horario punta, de ahí el termino rasurar las puntas), el cual brinda beneficios no solo en el arbitraje de precios, sino también en la reducción en el cargo de servicios como capacidad y distribución, otro de los beneficios más comunes es el de corregir la energía reactiva (que es el cargo que aparece en el recibo como factor de potencia), pero sobre todo y más importante el beneficio de la resiliencia.

Es importante mencionar que al momento se cuenta con la energía suficiente en las centrales de generación y las mismas son transmitidas por la empresa del Estado que es CFE, quien planea generará el 54 por ciento de la electricidad requerida por el país, pero para que esta energía pueda ser utilizada por los particulares como las empresas, se requieren inversiones en subestaciones que sirven para la producción, conversión, transformación, regulación y distribución de la energía, para lo cual poniendo un ejemplo cotidiano, CFE tiene una importante red de carreteras, pero para poder salir en diferentes ciudades se requieren las casetas o salidas, este es el símil de las subestaciones, ahí es donde CFE tiene complicaciones ya que para el 2023 el presupuesto establecido para la empresa es 6.9 por ciento inferior al monto que recibió durante el 2022 y solo un 11.5% estará destinado a inversiones.

Esta situación es la que notamos todos los días, con disturbios en la red que se reflejan en apagones, variaciones de voltaje que en el mejor de los casos activan las protecciones de las mismas instalaciones o puede llegar hasta quemar equipos, pero esto también se puede considerar una oportunidad desde cada una de las empresas o negocios al instalar equipos inteligentes de almacenamiento de energía que permiten, balancear, armonizar y proteger las instalaciones al interior de las mismas y todos los equipos que operan, esto sin mencionar el ahorro en pérdidas por paros de líneas de producción y el tener que volver a arrancar las mismas.

Son momentos donde uno de los factores de competitividad se presentará por la disponibilidad de recursos y en estos momentos uno de ellos es la energía, por lo que si requiere tener un guardadito de la misma para usos propios, por lo que lo mejor es contar con tu banco de almacenamiento y más si con los ahorros de la eficiencia en los usos y consumos se paga solo al plazo del tiempo.

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