En un entorno global marcado por tensiones geopolíticas, desafíos económicos y transformaciones tecnológicas, la economía de Aguascalientes se proyecta para 2025 como un modelo de desarrollo y resiliencia en México.
Así lo expresó Mauricio Duarte Rodríguez, director regional de Grupo Financiero Banorte, durante un análisis que conectó los desafíos del panorama global con las oportunidades que este dinámico estado puede aprovechar en el corto y mediano plazo.
“Aguascalientes es una de las economías más sólidas del país”, aseguró Duarte, destacando la importancia de la diversificación económica y el entorno favorable para los negocios.
El contexto global y sus implicaciones locales
El escenario internacional está en constante cambio, con retos significativos que afectan a todas las economías del mundo.
Las tensiones comerciales entre China y Estados Unidos, el envejecimiento poblacional en Europa, los conflictos armados y las políticas de sostenibilidad son solo algunos de los factores que influyen en el desempeño de las economías globales.
“Estamos en un momento en el que los mercados se están regionalizando y las grandes economías enfrentan desaceleraciones importantes”, explicó Duarte.
Europa, por ejemplo, crecerá apenas un 0.7% en 2025, lo que contrasta con el desempeño de economías emergentes como India, que espera un crecimiento del 6%.
México se encuentra en una posición única dentro de este panorama.
Su proximidad geográfica con Estados Unidos, su capacidad de producción competitiva y su creciente protagonismo como socio comercial lo convierten en un actor clave en la economía global.
En este contexto, la economía de Aguascalientes se perfila en 2025 como un ejemplo de cómo una región puede capitalizar sus fortalezas para superar desafíos externos.
“Estados Unidos necesita de México no solo por la mano de obra, sino también por la transformación industrial que aquí ocurre. Esto genera oportunidades para regiones como Aguascalientes, que cuentan con una base económica diversificada y una posición estratégica”, comentó Duarte.
Sin embargo, también advirtió que las políticas proteccionistas y los conflictos comerciales, especialmente entre las grandes potencias, siguen representando riesgos para la estabilidad de los mercados.
Aguascalientes: una economía resiliente y en crecimiento
El desempeño económico reciente de Aguascalientes es notable.
Con un crecimiento del 6% en 2023, Duarte subrayó que este avance posiciona al estado por encima del promedio nacional.
“Aguascalientes es una economía pequeña pero poderosa: representa el 1.34% del PIB nacional con apenas el 0.4% de la superficie del país y el 0.9% de la población”, destacó.
El estado también se distingue por su ingreso per cápita, que lo ubica como el segundo más alto en la región centro del país y entre los cinco primeros a nivel nacional.
Duarte atribuyó este éxito al dinamismo de sectores clave como la industria automotriz, la agroindustria, el sector textil y los servicios.
“Aguascalientes ha logrado evitar una dependencia excesiva en un solo sector, lo que lo protege frente a crisis globales y lo convierte en un modelo de estabilidad económica”, explicó.
Además, el estado cuenta con una base financiera sólida.
Aguascalientes es el segundo mejor calificado del país en términos de sanidad financiera, y su deuda pública es una de las más bajas, lo que permite operar con estabilidad y atraer inversión.
“Es un estado que no solo crece, sino que lo hace de manera ordenada y sustentable. Esto lo posiciona como un referente nacional”, añadió Duarte.
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Retos estratégicos: agua, energía y tecnificación
A pesar de sus fortalezas, la economía de Aguascalientes enfrenta desafíos significativos que podrían limitar su potencial de crecimiento en 2025 si no se abordan con urgencia.
Entre los más apremiantes se encuentran la escasez de agua, la necesidad de modernizar su infraestructura energética y la tecnificación de sectores estratégicos.
“El crecimiento demográfico y económico de Aguascalientes está ejerciendo presión sobre los recursos disponibles, especialmente el agua. Esto requiere inversiones importantes en infraestructura hidráulica y eléctrica para garantizar que el desarrollo pueda mantenerse en el tiempo”, señaló Duarte.
Otro desafío clave es la tecnificación de los procesos productivos y la modernización del transporte.
Duarte subrayó que estas medidas no solo mejorarán la competitividad del estado, sino que también serán esenciales para atraer mayores niveles de inversión extranjera.
Empresas de países como Alemania, Japón, Turquía e India ya han mostrado interés en Aguascalientes, motivadas por su seguridad, estabilidad financiera y cumplimiento del estado de derecho.
“El estado está atrayendo inversionistas altamente sofisticados que evalúan factores como la infraestructura, la seguridad y la productividad. Esto nos obliga a seguir mejorando y adaptándonos a las demandas del mercado global”, afirmó Duarte.
También destacó que la diversificación económica del estado es una ventaja competitiva:
“Aguascalientes no depende de un solo sector, como sucede en otras regiones del país. Su economía está distribuida entre servicios, industria, tecnología y agroindustria, lo que la hace menos vulnerable a las crisis.”
Una visión optimista para 2025
A pesar de estos desafíos, las proyecciones para el estado son optimistas. Duarte destacó que, aunque el crecimiento de Aguascalientes en 2025 no alcanzará el nivel récord de 2023, seguirá superando el promedio nacional.
Además, la estabilidad financiera del estado y su capacidad para diversificar su economía lo posicionan como un destino ideal para la inversión.
“Aguascalientes tiene todos los elementos para seguir siendo una región clave en el desarrollo económico de México. Su capacidad para crecer de manera sostenible, combinada con su entorno seguro y competitivo, lo convierte en un modelo a seguir para otras regiones del país”, aseguró Duarte.
El directivo también subrayó que el crecimiento poblacional del estado representa una oportunidad adicional.
Con una proyección de más de dos millones de habitantes para 2030, el dinamismo económico de Aguascalientes continuará impulsando la demanda de bienes y servicios, lo que a su vez fomentará el desarrollo de nuevos proyectos e inversiones.
Mirando hacia el futuro
El futuro de la economía de Aguascalientes se vislumbra lleno de oportunidades para 2025, pero también de retos que requerirán un enfoque estratégico y colaborativo.
Duarte concluyó su análisis resaltando la importancia de fortalecer la infraestructura, tecnificar la industria y garantizar el acceso a recursos clave como el agua y la energía.
“Aguascalientes es una región resiliente, competitiva y con un gran potencial. Pero para mantener su posición de liderazgo, será necesario innovar, invertir y trabajar de la mano entre los sectores público y privado”, aseguró.
En un mundo cada vez más incierto, Aguascalientes se perfila como un ejemplo de cómo una economía local puede prosperar mediante una combinación de planificación estratégica, diversificación y visión de futuro.
“Si logramos superar los desafíos, Aguascalientes no solo mantendrá su estabilidad, sino que se convertirá en un referente nacional e internacional”, concluyó Duarte.
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