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Aguascalientes, constante en Calidad y Competencia laborales

A decir de El Economista, el objetivo del Índice de Calidad y Competencia de la Ocupación Estatal es saber cómo se encuentran las 32 entidades del país en materia laboral, principalmente en acceso al trabajo y calidad de la ocupación, y a su vez realizar un ranking de competencia entre los gobiernos locales.

Según su nota metodológica, el índice se hace con base en ocho tasas complementarias de ocupación y desocupación, obtenidas de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), las cuales corresponden a: desocupación, ocupación parcial y desocupación, presión general, trabajo asalariado, subocupación, condiciones críticas de ocupación, informalidad laboral y ocupación en el sector informal.

En cada tasa complementaria se realiza un ranking estatal para asignar un valor. Este ejercicio se hizo con cada uno de los estados, al cierre de los primeros trimestres del 2019 y 2020, logrando un índice general con ocho tasas, con el mismo peso cada una, cuyo resultado se convirtió en un indicador con escala de 0 a 100 puntos, donde la entidad más cercana a 100 manifiesta una mejor calidad de la ocupación (para obtener 100 puntos la entidad debe ser la mejor en todas las tasas).

¿Por qué Aguascalientes ha quedado entre los primeros lugares del Índice de Calidad y Competencia de la Ocupación Estatal? La fuente indica que la entidad ha mostrado constancia en las ocho tasas complementarias de ocupación y desocupación.

Al cierre del primer trimestre, alcanzó las relaciones más bajas: lugares 23 en desocupación (3.8% de la PEA); cuarto en ocupación parcial y desocupación (7.2% de la PEA); sexto en presión general (5.2% de la PEA) y en informalidad laboral (40.1% de los ocupados); segundo en subocupación (1.5% de los ocupados); séptimo en condiciones críticas de ocupación (12.2% de los ocupados) y en ocupación en el sector informal (19.7% de los ocupados), y fue la tercera entidad con el mayor porcentaje de trabajo asalariado (77.2% de los ocupados).

¿Cómo pueden estar las cosas en la actualidad?

Las crisis económicas de México de las últimas cuatro décadas tienen como una de sus manifestaciones más graves la pérdida de empleos. Las crisis en México y Aguascalientes han tenido efectos en el crecimiento económico, el mercado laboral, en la desigualdad y en la pobreza desde los años 1980, los datos encontrados dan cuenta del incremento de la informalidad, la desigualdad y la pobreza a lo largo del periodo.

Un informe de la OIT señala que en la crisis del 2009 se perdieron más de 50 millones de empleos en el mundo, 0.9 % del total, de los cuales cerca de 7 millones correspondían al mercado de trabajo de EE.UU., cuya tasa se acercó al 10% (USA, Labor Department, 2009) y tardó más de cuatro años en recuperarlos y reducirla nuevamente al 6.3% (USA, Labor Department, 2014).

Es importante señalarlo porque ello provocó en México, debido a su dependencia económica con el país del norte -particularmente del sector industrial- la pérdida de poco más de 1 millón de empleos desde septiembre del 2008, llegando la tasa de desempleo al 5.5% (INEGI,2009), muy por encima del 3% registrado antes de la crisis (INEGI, 2007).

Se estimó que entre 1995 y el año 2000 se crearon 6.7 millones de empleos, de los cuales, 3.3 millones fueron formales, bajo el criterio de pertenecer al IMSS o al ISSSTE o a cualquier sistema de seguridad social legalmente reconocido. De lo anterior se desprende que los restantes empleos, poco más del 50%, resultaron ser informales.

En el primer trimestre de 2020, la tasa de informalidad laboral de Aguascalientes (40.9%) se sitúa en el primer cuartil entre las tasas más bajas, en conjunto con Baja California, Baja California Sur, Sonora, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León y Querétaro, estas entidades se ubican en el rango que va de 34.6 a menos de 45.7% respecto al total de la población ocupada. Tasas de informalidad más altas se presentan particularmente en el sur del país, donde se puede llegar a tener de 6 a 8 informales de cada 10 laboralmente ocupados.

Desocupación e informalidad laboral serán las variables que más van a escalar a la alza, con motivo de la contingencia por COVID-19.

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