Por Jaime Escalera
¿Puedes contar las veces en las que algún producto o servicio que compraste fue entregado con especificaciones distintas a las que esperabas? ¿O quizá las veces en las que el precio que te fue ofrecido no contemplaba los impuestos correspondientes? ¿Nunca te explicaron el tiempo de demora, herramientas de armado, políticas de mantenimiento o cargos por uso de dinero electrónico? ¿Te dijeron que tu expediente se “perdió”?
Este tipo de situaciones ocurren prácticamente todo el tiempo. Pero, ¿cuántas veces sucede esto en tu negocio? En la vida profesional, como vendedores y ejecutivos de servicio de atención al cliente, es muy fácil distraernos o abstraernos en nuestros pensamientos y búsqueda de beneficios particulares, lo que hace muy fácil involucrarse en diversas conversaciones o tareas simultáneas, y hasta charlas por Whatsapp
Esas distracciones se traducen a experiencias poco favorables para que tus clientes quieran regresar a comprar lo que les ofreces. Por ello, diseñar sistemas a prueba de fallas es una gran oportunidad para mitigar esta problemática, pero recuerda: una vez en función, los sistemas no fallan, lo que falla es la gente por su falta de atención.
Como vendedores profesionales y de alto impacto, es fundamental ser predecibles, confiables, tratar con cuidado a nuestros clientes y cuidar los detalles para brindar experiencias únicas.
Es decir:
- No apresurarse
- Repetir sistemáticamente los protocolos y procesos diseñados para la venta.
Eso requiere un sistema de entrenamiento y ejecución en nuestros protocolos de venta que lo ponga a prueba y permita mejorarlo.
Cuando un vendedor o colaborador de atención al cliente, no presta atención y constantemente comete errores las causas son dos:
- No le gusta el trabajo o función que desempeña.
- Está pensando en lo que hará después, una vez terminada la actividad actual.
Por ello te comparto una serie de actividades que permitirá a los vendedores enfocarse en los detalles que solicitan los clientes:
Organización: Un colaborador de cualquier área, que no entiende lo que debe hacer y cómo realizarlo dedicará 80% de su tiempo a procrastinar.
Elaboración de listas: incluir actividades, roles o funciones, directorios telefónicos, etc.
Sigue una programación específica: El diseño de un protocolo adecuado de ventas incluye una programación sugerida para tener éxito en diferentes partes del proceso comercial (prospección, planeación, presentación, etc.)
Limita las distracciones: Es recomendable no leer tus correos como primera actividad de la mañana, y obviamente alejarte del celular y las redes sociales a primera hora.
Nunca hacer varias cosas a la vez: Está científicamente comprobado que los humanos no somos “multitask” por más que digan algunos, nuestro cerebro no es una computadora cuántica.
Realiza pausas activas: Cada vez más empresas e instituciones educativas comprenden que el cerebro humano no está hecho para recibir información y permanecer atento por más de 45 minutos, por lo que una actividad recomendable para fomentar la atención y la creatividad es dedicar 5 minutos de pausa para dejar descansar nuestra mente.
Mejora tus habilidades matemáticas: Muchos errores al momento de vender, facturar y hasta regresar cambios es porque el uso de la tecnología va atrofiando nuestra capacidad de realizar operaciones mentales, que pueden agilizar algunos procesos básicos de ventas.
Aprende a meditar: Esta práctica relaja la mente y reduce el estrés, lo cual puede ayudarte con tu salud física y mental, además de favorecer tu memoria y tu atención a los detalles
Un adecuado y sobresaliente servicio basado en atención en los detalles brinda experiencias únicas que te harán diferente.
Construye un camino, toma una herramienta y construye: Lo mejor está por venir.
Te deseo excelentes ventas.
