En Aguascalientes, 6,247 personas por cada 100,000 habitantes fueron víctimas de la corrupción gubernamental el año pasado. Según la Encuesta Nacional de Calidad e Impacto Gubernamental (ENCIG) 2013, revelada por INEGI hace unos minutos, el estado tiene una de las tasas más bajas de prevalencia de la corrupción en el país.
Asimismo, la tasa de incidencia de la corrupción en el estado -es decir, la cantidad de actos de corrupción cometidos por alguno de los ámbitos de gobierno- es de 8,456 por cada 100,000 habitantes, la más baja de todo el país.
Aun así, contrasta el hecho de que, además de Colima, Guerrero (5,734/100mh), Tamaulipas (6,036/100mh) y Sonora (5,075/100mh) presentan tasas menores que la de Aguascalientes, a pesar de ser algunos de los estados con mayor inseguridad.
Según la encuesta, hasta 70 por ciento de la población de Aguascalientes considera que las autoridades municipales, estatales y federales son frecuentemente o muy frecuentemente corruptas. Sin embargo, la proporción de la ciudadanía que tiene esa percepción a nivel local es menor que a nivel nacional.
Los gobiernos municipales del estado de Aguascalientes son en los que más personas consideraron que la corrupción es “frecuente” o “muy frecuente”, pues 70.6 por ciento de los encuestados respondieron en ese sentido.
Para 69.8 por ciento de la población hidrocálida encuestada, la corrupción es “frecuente” o “muy frecuente” en el ámbito federal de gobierno, mientras que para el 69.7 por ciento de la ciudadanía lo es en el gobierno estatal.
Además, la región occidente, a la que pertenece Aguascalientes, tiene la segunda tasa más elevada de prevalencia de corrupción en cuanto al gobierno estatal y los municipales, así como la tercera en cuanto al gobierno federal.