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48 horas en Vail

Las vacaciones de fin de año son un pretexto perfecto para ir a lugares nevados. Y que mejor lugar que el pequeño pueblo de Vail, ubicado en Colorado, Estados Unidos. Fue fundado como centro turístico en 1962 y construido con un estilo de villa alpina. Su arquitectura y paisaje únicos lo convierten en uno de los destinos favoritos para visitar en estas fechas, especialmente para aquellos que les gusta esquiar o estar en contacto con la naturaleza.

Dónde hospedarse

Uno de los hospedajes más populares es Sonnenalp Hotel, que tiene un estilo rústico, lujoso y europeo, y que está localizado en el centro del poblado. Este sitio empezó siendo un motel en 1979, el cual era manejado por una familia; en la actualidad es un hermoso hotel de cinco estrellas. Podrás disfrutar de su spa europeo y del Swiss Chalet, restaurante que sirve comida alpina.

Si te preocupa el transporte, este hotel pone a tu disposición sus autos Volvo. También debes saber que Vail cuenta con transporte público gratuito todos los días del año.

Esquí, el principal atractivo

La estación de esquí es una de las más grandes de Estados Unidos. Tiene 5 289 acres para esquiar, una caída vertical de 3 450 pies y 31 ascensores. Sus 195 senderos atienden a una amplia gama de esquiadores; cuenta con pendientes para principiantes y carreras difíciles para expertos. No sólo se puede esquiar, también hay otras actividades como raquetas de nieve y ciclismo de esquí. La estación abre desde mediados de noviembre hasta finales de abril.

Senderismo con vistas impresionantes

Otra de las actividades que puedes hacer son las caminatas. Si quieres y puedes rentar un auto debes ir a Eagles Nest o Holy Cross, dos áreas con senderos impresionantes, ideales para mochileros. Si quieres un lugar más cercano al pueblo puedes hacer caminatas en la montaña de Vail, a la cual se puede acceder a través de una góndola.

Uno de los sitios favoritos de los senderistas es Booth Falls Trail, el cual se encuentra a poco más de una milla de la carretera interestatal 70, en el este de Vail. Es un sendero empinado con flores silvestres, cascadas y vistas a la Cordillera de Gore.

Para matar el hambre…

Aquí encontrarás todo tipo de opciones para comer. En este poblado hay muchos restaurantes de alta cocina. Si buscas una buena cena sin importar el precio, debes ir a Sweet Basil, un restaurante de lujo donde probarás foie gras, ostras crudas, tartar de búfalo y cangrejo rey de Alaska. 

Mountain Standard es una taberna estilosa y pequeña con un gran potencial. Su especialidad son los asados, que pueden ir desde cerdo glaseado con whisky hasta trucha de montaña asada con granola de sésamo y miel quemada.

En The Rose encontrarás galletas, bocadillos inusuales, ensaladas elegantes y cócteles de todo tipo. Un lugar para relajarte y comer algo rico si tienes un antojo.

Para relajarse un poco

Si quieres un momento de paz y vistas que te quitarán el aliento, tienes que visitar el jardín alpino de Betty Ford, nombrado así en honor de la ex primera dama, esposa de Gerald Ford, el presidente número 38 de Estados Unidos. Vail era el sitio vacacional predilecto de la pareja, la cual ayudó a que el pueblo floreciera. Además de admirar las plantas, flores y cascadas, podrás disfrutar de una vista impresionante a las Montañas Rocosas. Este lugar se encuentra a 2 500 metros sobre el nivel del mar.

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