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48 horas en el Santuario de las Luciérnagas

Cada año, las luciérnagas pintan la noche de algunos sitios del país con sus luces doradas. Miles de estos coleópteros (comúnmente conocidos como escarabajos) eligen los bosques de Tlaxcala, Puebla y el Estado de México, donde existe el ambiente ideal para que sus larvas se alimenten.

De los lugares más populares para apreciar este fenómeno están los municipios de Nanacamilpa y Españita, en Tlaxcala. Muchos creen que las luciérnagas viajan para llegar a este bosque; sin embargo, la especie que se encuentra aquí vive de manera permanente en él. En los meses de junio, julio y parte de agosto prenden sus luces para aparearse, por lo cual solo en esos meses se pueden apreciar.

Durante muchos años, el santuario se mantuvo oculto al turismo con el fin de protegerlo; pero en 2012, el Gobierno de Tlaxcala decidió hacerle publicidad para atraer visitantes y la respuesta fue inmediata. Es muy importante que si quieres hacer este viaje, sigas al pie de la letra las recomendaciones de los lugareños para no dañar a los insectos de luz.

Dónde hospedarse

La mejor opción para tener una experiencia completa es pasar la noche en uno de los ecohoteles de Nanacamilpa. Puedes rentar una cabaña en Piedra Canteada o en Villas del Bosque Santa Clara. Ten en cuenta que es un hospedaje sencillo y respetuoso con la naturaleza, así que no encontrarás grandes lujos, los cuales no necesitarás pues el bosque es de lo más hermoso.

También puedes acampar si te apetece. Hay zonas destinadas a ello dentro de los cinco centros ecoturísticos: Canto del Bosque, Xoletilandia, El Madroño, Xoletongo y Palangana.

Si no te interesa quedarte en este pueblito, puedes hospedarte en algún lugar de Tlaxcala, cuya cabecera se encuentra a poco menos de una hora de Nanacamilpa.

El Santuario

En caso de que te hayas hospedado en la ciudad, hay varios tours que puedes contratar para visitar las luciérnagas; casi todos parten de Tlaxcala. Si contratas alguno de lunes a jueves, puedes obtener un descuento.

Hay dos operadoras que te ofrecen recorridos: México Viejo y Oactli. Puedes elegir entre varios paquetes; la mayoría incluye otras actividades además de la observación de luciérnagas: visita al pueblo de Huamantla, talleres sobre pulque y hongos, visita a la Hacienda Pulquería, entre otras cosas.

Si elegiste pasar la noche en el bosque, puedes acercarte a los tours que ofrecen los hoteles o buscar alguno en uno de los centros ecoturísticos. El avistamiento comienza a las 8:30 de la noche y dura una hora aproximadamente.

Pasear por el centro histórico de Tlaxcala

Por su cercanía con el bosque, antes o después de que hayas visto el espectáculo bioluminiscente, puedes visitar la capital del estado más pequeño de México. Recorre a pie sus calles y admira su arquitectura colonial. La construcción de algunos de sus edificios se remonta a 1525.

Visita los murales que cuentan la historia de la entidad en el Palacio de Gobierno; el ex convento de San Francisco de Nuestra Señora de la Asunción, el cual conserva su techo artesonado de madera; y la Calzada de San Francisco, un paseo con árboles y piso de cantera que te lleva hasta la plaza de las artesanías.

Lugares para comer…

En Nanacamilpa puedes comer en el restaurante del hotel Villas del Bosque Santa Clara. Encontrarás platillos típicos regionales, como tlacoyos o quesadillas, cortes de carne y variedad de vinos. El pan y las tortillas son elaborados de manera artesanal.

Si decides visitar Tlaxcala, encontrarás muchas opciones para saciar el hambre. Una de ellas es Vinos y Piedra, una mezcla de comida mediterránea y mexicana. Fonda del Convento es otro sitio que ofrece comida típica de la región y un ambiente acogedor.

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