Escrito por Tomás Sarmiento
- Invierte a largo plazo (cuando menos 7 años)
Está comprobado que las posibilidades de ganar dinero y no perderlo incrementan al dejarlo el mayor tiempo posible. Si observas cualquier acción de alguna Bolsa de Valores te darás cuenta que, en su mayoría, a pesar de las subidas y caídas, en el largo plazo la tendencia es positiva. El corto plazo es mucho más riesgoso y se asemeja más a tirar una moneda al aire y esperar ganar.
Un ejemplo claro es Apple Inc., si hubieras invertido hace 7 años una cantidad de $100,000 dólares equivalente a 3,302 acciones de Apple ($30.28 USD /acción en enero 2010); ahora tendrías $589,365 ($178.46 USD/acción enero 2018). Es decir 5.89 veces tu inversión inicial. Esto a pesar de las múltiples caídas que ha tenido a lo largo de estos últimos 7 años.
- No inviertas el dinero que utilizarás para vivir.
Debes tomar en cuenta que siempre existe un riesgo y el peor escenario es que puedes perderlo todo, por lo que es de vital importancia que tu patrimonio no sea la fuente de esta inversión pues en caso extremo de perder ese dinero, lo estarías perdiendo todo.
La fuente de cualquier inversión debe provenir de cualquiera de estas dos opciones:
- Excedente en nuestros ingresos: Es lo que nos sobra y que podemos aprovechar para invertirlo.
- Un porcentaje asignado de nuestros ingresos (A demás del que tengamos asignado para ahorro).
- Debes estar abierto tanto para perder todo el dinero como a tener grandes o pequeñas ganancias.
Sin duda alguno el futuro es incierto, ni los mejores analistas financieros saben con exactitud lo que pasará en un futuro con los mercados financieros, las crisis siempre han sido parte de la historia y podrían afectar nuestra inversión de manera negativa y podríamos llegar a perderlo todo. Este riesgo no debe asustarnos pues es un comportamiento natural en cualquier economía.
- Diversificación:
Como dice el dicho: “No pongas todos los huevos en la misma canasta”. Esta es una operación básica en los mercados financieros pues a través de la diversificación podemos disminuir el riesgo de perder y al mismo tiempo nos ayuda a obtener el mayor retorno de inversión al menor riego posible.